Cristiano Ronaldo sufrió como nadie la eliminación de Portugal a manos de Bélgica en la Eurocopa 2020. La vigente campeona cayó en octavos de final y la leyenda portuguesa lo pasó muy mal: lanzó y pateó su brazalete de capitán. ¿Competitividad o falta de respeto?
Portugal quedó fuera de la Eurocopa 2020 tras perder ante Bélgica (0-1) en octavos de final. El balance es frustrante para la vigente campeona. Y Cristiano Ronaldo lo reflejó más que nadie: el capitán lanzó y pateó su brazalete en el camino a los vestuarios.
Luego de saludar a Kevin De Bruyne, “CR7” dejó caer su cinta de capitán para posteriormente patearla. Acto seguido, un miembro del cuerpo técnico la tomó del suelo.
El goleador de la Eurocopa 2020 -momentáneamente- continuó realizando gestos que evidenciaron frustración con sus brazos. La impotencia por caer era notoria.
No es una actitud nueva en Cristiano Ronaldo, quien a lo largo de los años, con palabras y acciones, ha demostrado ser uno de los atletas más competitivos de la historia. Sus ganas de superar retos son casi inigualables.
Claro está, cuando no consigue sus objetivos, explota. Muchos podrían tomar el acto como una falta de respeto a la selección nacional. Portar la cinta de capitán de su país es el máximo honor que un futbolista puede tener. Por ende, la leyenda portuguesa también fue blanco de críticas.
Fuera de contexto cabría esta última explicación. No obstante, al observar la manera en la que Cristiano vive cada momento, la razón más acorde es la frustración. Para bien o para mal, es un animal competitivo al que le queda un último gran reto por delante: la Copa Mundial Qatar 2022.
